jueves, 27 de mayo de 2010

Temporada de premios, cartelera local y más (III)

La Isla Siniestra 


La última película de Scorsese no es una obra maestra, pero tampoco es fallida. Teddy Daniels (Leonardo Di Caprio) es el detective a cargo de una investigación en Shutter Island, una prisión de máxima seguridad para criminales psicóticos que, por la tensión que se percibe a la llegada, guada un oscuro secreto. La atmósfera es un punto a favor: densa, donde las miradas furtivas son más que casuales y una sonrisa puede significar más de lo aparenta. Se agradece también los pequeños roles de Patricia Clarkson y Jackie Earle Haley que contribuyen con la expectativa y la incertidumbre.


Los personajes están correctos: un Di Caprio ensimismado; Mark Ruffalo siguiéndole los pasos como un dubitativo detective compañero; Ben Kingley y Max Von Sydow le otorgan la cuota de elegancia y aún más misterio a la trama. Sin embargo, es tanta la prolongación de la tensión que puede llegar a cansar. Los flashback con la esposa muerta de Daniels solo ayudan para acrecentar la incertidumbre. Ahora bien, el problema radica en que con el desenlace la tensión no logra ser compensada y se crea una cierta sensación de decepción. Pienso que se pudo cerrar con un desenlace más creativo o abordarlo desde otra perspectiva. No obstante, no deja de ser valioso y los momentos finales (que nos hacen recordar cuando se camina hacia el pelotón de fusilamiento) son memorables.



Puntuación: 7.5/10


Criatura de la noche 


La película de Tomas Alfredson es el mejor estreno en lo que va del año, tanto por su sutileza como por su frialdad, sinceridad y realismo al tocar un tema tan manido como el del mundo vampírico. Oskar es un púber en plena época de cambios en la Suecia de los años 80; no lleva una vida agradable: padres divorciados, matones en el colegio. Pero en medio de ello, una nueva y curiosa vecina: Eli. Los primeros acercamientos entre ellos no son muy agradables, pero finalmente terminan aceptándose el uno al otro, pues estamos ante dos almas solitarias muy parecidas en su soledad o dos témpanos de hielo que a la deriva en un mar helado se encuentran para no volver a separarse.


A partir de esta historia cotidiana aparece el elemento extraordinario: Eli es vampiro. Oskar es poco común y esto no lo asusta una vez que lo descubre. Pero, creo yo, lo importante de la película no es el tema del vampirismo, sino como dos jóvenes se relacionan, se apoyan y finalmente se enamoran. Así, Oskar  conseguirá enfrentar sus temores: confrontará a los muchachos que siempre lo acosan en el colegio, en magistral secuencia "nevada" filmada a menor velcoidad para denotar una transición: quizás la perdida del miedo y cobardía, quizás la madurez; todo gracias a que siempre tendrá a Eli "protegiéndolo".


El descubrimiento de un nuevo mundo es quizás el tema principal: Oskar descubre el amor, Oskar descubre que Eli es un vampiro, Oskar descubre que su mundo no tiene límites y que puede dejar de tener miedo. Eli,  por su lado, tiene a alguien a quien proteger y con quien se siente bien (o quizás le hace recordar que aún  tiene algo de humanidad). Así Eli descubre que es vulnerable también y que puede incluso arriesgar su vida por Oskar (memorable escena donde invade la casa sin ser "invitada"). Y también vale destacar los temas secundarios, como los ataques perpetrados por el proveedor de Eli, cuyo final lleva a una reflexión, y las reacciones de los vecinos ante los extraños sucesos en su vecindario (aunque en un tono menor).


El final es sorprendente (uno de los mejores que he visto en mi vida) y no lo revelaré del todo. Una piscina, una agresión, sangre: elementos que signifcarán el inico de una nueva vida; un tren y un maleta: aquella nueva vida ya ha empezado y se inicia un nuevo ciclo en la vida de Eli. Oskar...a vivir con todas sus fuerzas mientras pueda. 


Puntuación: 9/10

2 comentarios:

José Luis Huerto Aguilar dijo...

oie webon tienes lectores en indonesia y en las islas canarias! pronto podrás ganar dinero con tu blog poniendo publicidad de pepsi xD

Anónimo dijo...

creo que aún falta mucho para eso